Y en un domingo lluvioso, nos animamos a asistir a un evento citado en Twitter (red social), y llevado a cabo en una cancha sintética de la ciudad de Medellín, a la que nunca habíamos ido. Nunca habíamos tenido necesidad tampoco.
El parche fue llamado Twits and kicks.
La idea era: Trinar y jugar futbolito. O sea, escribir que ya ibas para la cancha (en 140 caracteres o más), y allá, ponerse los cortos y jugar un rato (hasta el aire se le acabe).
Nosotros, que no íbamos a jugar (por supuesto) llegamos 1 hora tarde a la cita a "ciegas" excusada en una jugada de futbol y en una posterior tomada de cerveza.
Después de saludar a los pocos que conocíamos, montamos nuestro portátil, y con el Comcel Móvil (con el lento comcel móvil), conectamos nuestra cámara a Livestream, y no dio. Y después de dar vueltas y clics, llegamos a Ustream, y de ahí pudimos transmitir 18 minutos de emoción y desorden:
El micrófono nunca dio señal, pero transmitimos alguito.
Era nuestra estrategia para estar en el Twitsandkicks sin sentirnos raros. Más de lo que somos. Y nuestro aporte, al movimiento virtual, experimental y comunicativo que se anda gestando en las redes sociales Colombianas.
Aprendemos, enseñamos, y nos divertimos con amigos y desconocidos.
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